Esta silla de gran tamaño combina comodidad, tradición y un guiño visual a Oaxaca. Hecha en macuil, una madera clara y serena, cuenta con un respaldo suavemente tapizado por manos artesanas que aportan textura y calidez. Su asiento de madera, pintado en un tono verde Antequera —icónico de la arquitectura oaxaqueña— suma identidad y carácter. Los descansabrazos refuerzan su confort, haciendo de esta pieza una compañera ideal para largas sobremesas, rincones de lectura o espacios donde el diseño dialoga con la cultura. Hecha a mano por Carpintería Huayapam.